Falta poco mas de una semana para que acabe el verano y el tiempo no nos esta acompañando mucho,hace bastante fresquito y la playa o la piscina parece que han tocado su fin, a no ser que salgan unos días calurosos que nos iremos a disfrutar de la arena un poco,aun no hemos guardado la ropa de verano confiando en que vengan días así.

Aparte del tiempo la peque ha estado mala casi desde que volvimos del pueblo, primero con una especie de gastroenteritis con fiebre y ademas resfriado,la verdad que no ha sido su semana,la pobre ha estado muy apagada,cuando ya se ha encontrado mejor nos hemos ido a pasar una mañana jugando por el monte; llevamos una pelota pero la verdad que no le hizo falta porque se lo paso en grande cogiendo bellotas, viendo los patos y los renacuajos,pasamos un rato muy bueno por allí,encima no había casi nadie.
Me encanta el monte cuando llega el otoño,esperamos disfrutar mucho de él cuando lleguen sus colores preciosos,sus hojas,sus frutos,ya queda poco…