Pasan los días y llego el invierno,este año le ha costado para lo que es habitual aquí pero ha llegado con la lluvia,con la humedad,con granizos,y con mucho frío,soy muy friolera y me cuestan mucho estos días,ando con el ritmo lento,me cuesta levantarme mas de lo habitual y me ha costado cambiar el chip,incluso he estado unos días como apagada,cosa que me pasa por temporadas,me vuelvo introspectiva,de darle vueltas a las cosas y me ha apetecido hibernar como los osos con la peque a mi lado,después de estos días tontos pero hasta necesarios yo creo,me apetece hacer cambios y hemos empezado por la casa,por los horarios y por las rutinas.
Pequeños cambios,ordenar la casa,tirar cosas que a veces acumulamos por pereza de no moverlo de ahí, cambiar muebles de sitio y poner estantes nuevos,hacer planes para reorganizar la casa, siento que pierdo mucho tiempo ordenando cosas que no valen para nada, también los juguetes, hemos ordenado y guardado los que ya no usa,todo esto aprovechando las vacaciones de él porque sino es imposible con la peque haciendo la tarea inversa,y gracias a él mal tiempo también.
Y ha habido dias para aprovechar la lluvia y que la peque se lo pasará bien con sus botas en los charcos,bien abrigada y con un paraguas, aunque lo de abrigarse le cuesta mucho, todo le agobia y es difícil ponerle un gorro o una bufanda,la verdad que no me extraña,da tanta pereza llenarse de ropa en invierno…
Días de estar más rato en casa y leer a solas o también acompañada,los dos han disfrutado de estos grandes momentos sin prisas.
Ratos de juegos en la sala donde hemos trasladado algunos juguetes en una estantería; me preguntaron hace poco si la peque juega ella sola, la verdad es que casi siempre requiere a alguien a su lado,pero ella juega a su aire la mayor parte del tiempo,llevando sus juguetes allá donde estoy,es decir que no juega en soledad en una habitación ,le gusta tener compañía como es lógico aunque luego juegue ella sola.
Después del exceso de azúcar de las Navidades nos apetece comer más sano,estos días apenas nada de azúcar,muchas verduras,cremas,purés, y cereales en forma de granola casera para desayunar.
Hubo un día en el que estuvo granizando,y cogimos unos cuantos para jugar,y verlos mejor con la lupa, como disfruta con cosas diferentes.
Y también días de paseos y de disfrutar en la calle, después de llover siempre sale el sol.
Pasan los días y los momentos,yo solo quiero disfrutar más esos instantes diarios, del día a día, parar la mente y quedarme con esos instantes…qué difícil ¿Verdad?
Uyyyy te leo melancólica!!!A mí este tiempo también me pone un poco de bajón pero con el peque no me da tiempo ni a pensar, lo acapara todo, hasta el silencio. Lo bueno es saber acomodarse y positivizarlo todo, no!!??
Un beso
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Ya la verdad que sí que estoy melancólica y dando vueltas a la cabeza, soy muy dada a eso, en fin lo que sea será jajaja, la mía también acapara todo todo ainss
Besos
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Ay, no sabes las ganas que tengo yo de hibernar también… Por aquí también ha llegado el mal tiempo, pero es lo que toca, supongo. Besos!
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mas slowlife que nunca 😉 bueno todo es necesario , te entiendo a mi me pasa lo mismo
un besico
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Es que el invierno es melancólico jajaja, animo!
Besos
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qué necesario era el invierno… yo estaba toda desreglada, creo que las estaciones estàn por algo y también debemos pasar por el frîo, que al fin y al cabo no està tan mal!
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Yo también soy de la opinión de que cada tiempo en su estación, pero este año anda muy loco por aquí, llevamos más de una semana con 18-19 grados…
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