1/52  Queríamos empezar el año con fuerzas renovadas después de estos últimos meses que han sido todo un batiburrillo de emociones,buenas y malas,así que el primer día del año a pesar del frío que esta haciendo subimos al monte con la peque por uno de los senderos con mas cuesta que hay, ella se lo paso en grande como siempre que vamos al monte y no le importo nada andar y subir cuestas empinadas; el resto de la semana ha sido entre repostera, casera y de esperar con ilusión los Reyes Magos y los regalos.

Por aquí hay una especie de tradición montañera de empezar el año subiendo al monte,así que este año que la peque anda,corre y salta un montón,vamos que no para,subimos nuestro monte mas cercano y pasar la mañana allí bajo un sol que se agradecía pero con muchisimo frío, de ese frío que ya no sentíamos desde hace años y con el que llevamos ya unas cuantas semanas.

Una mañana genial para empezar el año y coger esas fuerzas que tanto necesitamos para volver a los días de rutina después de las Navidades.

Esta semana hemos hecho un montón de repostería,la peque y su aita hicieron el Roscón de Reyes como todos los años, y nosotras unas galletas con trocitos de chocolate que nos supieron a gloria,la peque disfruta mucho de estos ratos cocinando, y cada vez se ofrece a hacer mas cosas, hemos abusado un poco del azúcar estos días,pero como todo vuelve a la normalidad,ya hemos empezado a bajar los niveles jeje.

Y los Reyes siempre son en casa de sus abuelos,nosotros celebramos Olentzero en casa,la peque entiende bien que los regalos son repartidos, en cada casa celebramos una cosa para no juntarnos con demasiados regalos,sobre todo porque es la única peque de la familia.

Ese día se lo pasó genial,un día especial para los niños y sobre todo este año que ella ya es consciente de muchas de las cosas