El domingo entramos en el otoño y ya volvemos a las rutinas de la escuela y trabajo, también vuelvo al blog que se ha tomado un pequeño y merecido descanso este verano; la peque con sus cinco años esta imparable y disfrutando a tope de todo cada día mas,dejando atrás muchos de sus miedos de forma natural pero que la impedían hacer muchas cosas, así que este ha sido un verano lleno de experiencias, de aprendizajes, y de jugar en muchos escenarios diferentes al aire libre, un verano que me gustaría seguir recordando siempre.
Lo mejor es que nos ha hecho muy buen tiempo,vivimos en el norte y a veces los veranos son muy variables pero este ha sido de muchos días de sol, lo que nos ha permitido ir muchos días a la piscina, aun no sabe nadar pero ha aprendido a meter la cabeza un poco,y aunque lleva manguitos o churro le encanta el agua.
En su cumpleaños le regalamos la bicicleta evolutiva de Imaginarium, la compramos de segunda mano en Wallapop nuevisima y muy barata, y le ha venido de maravilla para aprender sin ruedines; desde entonces ha estado practicando sin los pedales haciendo equilibrio, lo mejor es que hace pocos días se ha lanzado con los pedales y va genial, podemos decir que ya ha aprendido a montar en bici y ademas le encanta.
Hemos descubierto muchos parques bonitos y diferentes a los típicos vallados y con suelo de corcho como este en plena naturaleza.
Ademas columpiarse en bañador es aun mejor como en este columpio de la casa rural a la que fuimos cerca de Zaragoza, un sitio fenomenal para jugar y disfrutar de la naturaleza y el campo.
Reconozco que soy muy fan en verano de meter los pies en cualquier sitio que vea con agua y mi peque se ha contagiado de esta costumbre, hemos metido los pies en muchos sitios diferentes con verdín y resbalones incluidos, una gran experiencia sensorial y refrescante 🙂
Y haciendo tan bueno no podemos faltar a nuestras bonitas playas del norte, la peque ha jugado en la arena, ha saltado charcos y olas como la que mas, la playa siempre es diversión y juego.
Y de la playa a los campos de Castilla ,un verano lleno de experiencias diferentes y escenarios, la peque ha jugado en el pueblo y ha disfrutado de la vida sin horarios,sin coches y de jugar en la calle, ha descubierto lo genial que es subirse a las alpacas de paja o pasear por la arena de los pinos descalza.
Hemos visitado algunos Museos como el Museo de la Ciencia en Donosti y si visitáis esta preciosa ciudad con peques no os lo podéis perder, es todo aprender y jugar con la Ciencia de forma interactiva, a la peque le encantó todo lo relacionado con el agua y la luz, muy divertido; estuvimos dentro mas de tres horas y nos quedo la zona del Planetarium por ver, no hice muchas fotos porque nos lo pasamos pipa; la entrada se puede sacar on-line.
También estuvimos en el Acuario de peces de agua dulce de Zaragoza,es el mas grande de Europa y es cierto que es enorme, hay peces de ríos de todo el mundo,también del Ebro,muy entretenido,a la peque le gusto mucho.
Y estuvimos en un Parque Natural donde vivimos unas experiencias increíbles es el Parque Natural del Monasterio de Piedra en Zaragoza también, un lugar precioso entre desiertos donde hay cascadas de agua que te dejan con la boca abierta, lo mejor sin duda fue pasar por una cueva y ver por dentro la cascada, a la peque le gusto tanto que hicimos el recorrido de la cueva dos veces, muy recomendable para los peques, eso si con bebes hay que utilizar porta bebes,con el carrito no podrías ver todo el recorrido; la entrada se puede sacar on- line para el mismo día.
Otro lugar mágico y lleno de experiencias que no olvidaremos este verano es El bosque pintado de Oma cerca de Gernika, hay que andar un rato para llegar pero sin duda el paraje es espectacular y los arboles pintados por Ibarrola son maravillosos, recomendable pasar por la oficina de información para coger un folleto donde te indica los nombres de las obras; la peque se lo paso pipa adivinado que era cada pintura; un museo al aire libre ideal; si vais con bebes también mejor porteando.
Y ver el Centro de Recuperación de animales de Basondo al lado del bosque de Oma y del precioso Urdaibai también resultó una experiencia emocionante y educativa, hay muchos animales que recogieron heridos: lobos, linces,aves como buitres, alces,gamos, también animales de granja y reptiles; un señor muy majete que trabaja allí reunió a todos los niños y les estuvo enseñando y dejando tocar a los reptiles y al erizo, les explico muchas cosas de manera muy divertida. La peque salió encantada,ademas pudo tocar conejos y dar de comer a una cabra pequeña.
Las vacaciones han sido de recargar pilas pero estas experiencias de verano sin duda les hacen crecer y aprender mas que cualquier otra cosa,ver como se emocionan y se asombran con cosas no materiales es desde luego lo mejor que les podemos dar, y sin irnos muy lejos de casa.
Os dejo los enlaces de los museos por si queréis echar una ojeada 🙂